Según la historia narrada en el libro de Éxodo, Dios escribió con su dedo los 10 mandamientos en dos tablas de piedra y se los entregó entre truenos a Moisés en el monte Sinaí.
¿Quién se le entrego los Diez Mandamientos?
Según el relato bíblico, mientras conducía a los judíos en el éxodo a Tierra Santa, Moisés llegó ante el monte Sinaí, ascendió a su cima y allí Dios se le manifestó y le ordenó que proclamara ante el pueblo el decálogo, los diez mandamientos, Moisés dictaría asimismo el conjunto de leyes rituales que se recogen en los cinco primeros libros de la Biblia,
¿Qué le dijo Dios a Moisés cuando le entrego los 10 mandamientos?
Alma 25:16: Apocalipsis 19:10 – Comprendemos la Ley de Moisés mediante el “espíritu de profecía” o sea el “testimonio de Jesús”. En resumen, al estudiar la Ley de Moisés podemos esperar encontrar (1) un testimonio de Jesucristo y de su sacrificio expiatorio, y (2) los principios del evangelio ilustrados en las leyes dadas.
Tal vez ya no se requiera que los fieles cumplan muchas de las leyes, pero los principios enseñados son eternos y nunca serán abandonados. Por ejemplo, la práctica de los sacrificios de sangre llegó a su fin cuando Cristo vino y en lugar de ella fueron dados los símbolos de la Santa Cena, reemplazando a la vieja ley.
Pero el principio era tan verdadero en la época en que los animales eran ofrecidos sobre el altar como lo es ahora cuando el pan y el agua son bendecidos por el sacerdocio. Este principio eterno es que solamente participando del sacrificio expiatorio del Cordero podemos vencer nuestros pecados y recibir el perdón por haberlos cometido.
“A fin de entender la ley bíblica, es necesario entender también ciertas características básicas de esa ley. Primero, hay declaradas ciertas premisas o principios generales y los Diez Mandamientos nos dan ese tipo de declaración. Por lo tanto, los Diez Mandamientos no son leyes entre leyes, sino las leyes básicas de las que las demás son ejemplos específicos.
Como ejemplo de esta ley básica tenemos Exodo 20:15 (Deut.5:19), ‘No hurtarás’ “Teniendo en cuenta que primero la ley establece principios amplios y básicos, examinemos una segunda característica de la ley bíblica, y es que la mayor parte de ella es la ilustración del principio básico en términos de casos específicos.
Estos casos a menudo son ilustraciones de la aplicación de la ley; eso es que al citar un ejemplo menor del caso, los límites necesarios de la ley son revelados “La ley, entonces, primero, afirma los principios; segundo, cita casos a fin de exponer las implicaciones de esos principios; y tercero, tiene como fin y meta la restitución del orden de Dios “.
(Rushdoony, Institutes of Biblical Law, págs.10-12.) A medida que estudiemos el código de Moisés veremos numerosos ejemplos de la ilustración de las diferentes leyes por medio de casos o ejemplos. Segundo, la ley es principalmente prohibitiva. Ocho de los Diez Mandamientos y muchas de las otras leyes versan sobre lo que no debe hacerse en lugar de lo que se debe hacer.
- A menudo, por causa de nuestra formación cultural, contemplamos con cierto disgusto ese tipo de leyes; tenemos el sentimiento de que son muy restrictivas y preferimos expresiones positivas que, asegurando nuestros derechos, parecen otorgar libertad.
- Sin embargo, las apariencias engañan.
- Dios dio las leyes a Israel no para oprimir al pueblo sino para garantizar la mayor libertad individual posible.
Para explicar cómo esto es posible, un estudioso de la Biblia declaró: “Un concepto prohibitivo en la ley confiere un doble beneficio: primero, es práctico en el sentido de que trata de una manera realista un mal particular. Dice ‘No hurtarás’, o, ‘No hablarás falso testimonio’.
- Tal declaración negativa encara directa y claramente un mal particular: lo prohibe, lo hace ilegal.
- La ley tiene así una función modesta; la ley es limitada y, por lo tanto, el estado o gobierno se ve limitado a atacar el mal y no a controlar a los hombres.
- Segundo, y directamente relacionado con el primer punto, un concepto prohibitivo en la ley asegura la libertad ; con excepción de las áreas prohibidas, todos los otros aspectos de la vida del hombre están fuera del alcance de esta ley.
Es decir, si el mandamiento dice ‘No hurtarás’ ello significa que la ley solamente puede gobernar el hurto: no puede gobernar o controlar la propiedad adquirida honradamente. Al prohibir la blasfemia y el falso testimonio, garantiza que toda otra forma de expresión tiene lugar.
El negativismo de la ley es la preservación de la vida y de la libertad del hombre,” (Rushdoony, Institutes of Biblical Law, págs.101-2.) Recordemos que en su prefacio de los Diez Mandamientos Dios dijo: “Yo soy Jehová tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre ” (Exodo 20:2; cursiva agregada).
Al decir esto, Jehová hizo recordar a Israel que el propósito de la ley era hacerlos libres y preservarlos así.
¿Que le entrego Dios a Moisés y con qué finalidad?
Moisés se encontraba en el Monte Sinaí cuando el Señor lo llamó para liberar a los israelitas del cautiverio egipcio (véase Éxodo 3). El Señor prometió a Moisés que después que sacara a los hijos de Israel de Egipto, ellos servirían “a Dios sobre este monte”, o sea, Sinaí (Éxodo 3:12).
Tras el milagro del Mar Rojo, Moisés escribió un cántico en el cual decía que el Señor había guiado a los israelitas fuera de Egipto para que estuvieran en Su “santuario”, que es “en el monte de tu heredad” (Éxodo 15:17).Desde el momento en que Moisés recibió el llamamiento de profeta, parte del plan de Dios era encaminar a los hijos de Israel al Monte Sinaí, un lugar que el Señor había hecho santo.
De acuerdo con Doctrina y Convenios, Moisés trató de llevar al pueblo a la presencia del Señor por medio de las ordenanzas del sacerdocio (véase D. y C.84:19–24). En la actualidad, diríamos que Él deseaba llevarlos al templo para recibir poder de lo alto.
¿Quién recibe las tablas de la ley?
De Wikipedia, la enciclopedia libre
Moisés rompiendo las Tablas de la Ley | |
---|---|
Año | 1659 |
Autor | Rembrandt |
Técnica | Óleo sobre lienzo |
Estilo | Barroco |
Tamaño | 168.5 cm × 136.5 cm |
Localización | Gemäldegalerie, Berlín, Alemania |
Moisés rompiendo las Tablas de la Ley es una pintura al óleo sobre lienzo realizada en 1659 por Rembrandt, La obra está firmada y fechada “REMBRANDT F.1659.” y se representa a Moisés con las tablas de la ley por encima de su cabeza, con los mandamientos escritos en hebreo (el artista fue ayudado seguramente por amigos judíos ).
¿Qué le dijo Dios a Moisés en el monte?
Moisés y los ancianos en el Monte Sinaí 24 Dijo Jehová a Moisés: Sube ante Jehová, tú, y Aarón, Nadab, y Abiú, y setenta de los ancianos de Israel; y os inclinaréis desde lejos.
¿Dónde se guardaron los 10 mandamientos?
Donde Guardaban Las Tablas De La Ley? El arca de la alianza o arca del pacto es un cofre de madera cubierto de oro descrito en relatos bíblicos que, según la tradición judía, fue diseñado y creado por mandato divino para guardar las tablas de los diez mandamientos.
¿Qué ley fue abolida en la cruz?
La ley mosaica está abolida para el cristiano LA LEY ABOLIDA PARA EL CRISTIANO CONVERTIDO Esto de “la ley abolida” suena muy sospechoso en los oídos aun de muchos que no son adventistas. Sin embargo, esto es el corazón de toda la discusión. Si la ley.
- More La ley mosaica está abolida para el cristiano LA LEY ABOLIDA PARA EL CRISTIANO CONVERTIDO Esto de “la ley abolida” suena muy sospechoso en los oídos aun de muchos que no son adventistas.
- Sin embargo, esto es el corazón de toda la discusión.
- Si la ley está en vigor, los adventistas están en lo cierto, y los que los combaten están equivocados, porque “la ley dice.
“, y el adventista pretende ó procura hacer, mientras que si la ley dice y el evangélico no hace ó procura hacer nada, ¿cómo será justificado? Si no pudiera demostrar que la ley está abolida para mí, entonces voy a empezar a guardar el sábado y los demás detalles, porque en la ley está mandado que se guarden.
¿Cuál es la alianza entre Dios y Moisés?
La alianza del Sinaí Esta alianza es la culminación del propósito de Dios de liberar a Israel de la opresión egipcia que había sido prometida a Moisés en el episodio de la zarza ardiente (Ex 3): «Ya habéis visto lo que he hecho con los egipcios, y cómo a vosotros os he llevado sobre alas de águila y os he traído a mí.
¿Cuál es la diferencia entre la ley de Moisés y la ley de Dios?
La ley de Moisés fue dada a causa de las transgresiones, mientras Dios preparaba al mundo para la venida de Cristo.
¿Que le pidió Dios a Moisés Egipto?
Moisés deberá liberar a su pueblo Moisés llegó a lo alto del monte y vivió un emocionante encuentro con Dios, donde le fue encomendada una difícil misión: Liberar al pueblo hebreo de la tiranía de Egipto, junto a su hermano Aarón. Jueves 31 de marzo de 2016
D ios le pide a Moisés que se quite las sandalias porque el lugar que está pisando es tierra santa, se presenta ante él y le entrega la misión de volver a Egipto y liberar al pueblo hebreo para llevarlos a una tierra buena y amplia. Después que conozcan su poder, los egipcios dejarán libres a los hebreos y les entregarán todos sus bienes, le asegura Dios a Moisés antes de entregarle la primera prueba que tendrá que usar para comprobar que él es el libertador.
Moisés toma conocimiento de la segunda prueba que demostrará que él es el enviado de Dios y si aún así, alguien lo pone en duda, tendrá que derramar un poco de agua del Nilo en tierra seca y ella se convertirá en sangre. Además, Dios le comunica a Moisés que será su hermano Aarón el encargado de ayudarlo en esta misión.
Moisés deberá encontrarse con Aarón en el desierto para cumplir juntos con la difícil misión. Además, si el Faraón de Egipto se niega a entregar libertad a los hebreos, Moisés debe decir las siguientes palabras: “Así me dijo el Señor. Israel es mi hijo, si te niegas a liberar a mi pueblo yo mataré a tu primogénito”.
: Moisés deberá liberar a su pueblo
¿Qué dice Jesús de los 10 mandamientos?
Los Diez Mandamientos son principios eternos del Evangelio, necesarios para nuestra exaltación. El Señor los reveló a Moisés en la antigüedad (véase Éxodo 20:1–17 ) y los ha repetido en las revelaciones de los últimos días (véase D. y C.42:18–29 ; 59:5–13 ; 63:61–62 ).
“No tendrás dioses ajenos delante de mí” ( Éxodo 20:3 ). Debemos hacer “todas las cosas con la mira puesta únicamente en la gloria de Dios” ( D. y C.82:19 ). Debemos amar y servir al Señor con todo el corazón, alma, mente y fuerza (véase Deuteronomio 6:5 ; D. y C.59:5 ). “No te harás imagen” ( Éxodo 20:4 ). En este mandamiento, el Señor condena la adoración de ídolos. La idolatría puede tener muchas formas. Algunas personas, aunque no se inclinan ante imágenes grabadas o estatuas, igualmente reemplazan al Dios viviente con otros ídolos como el dinero, las posesiones materiales, las ideas o el prestigio. Para ellos, “su tesoro es su dios”, un dios que “perecerá con ellos” ( 2 Nefi 9:30 ). “No tomarás el nombre de Jehová tu Dios en vano” ( Éxodo 20:7 ). Si deseas una explicación de este mandamiento, fíjate en “Blasfemias y vocabulario soez”, páginas 39–40. “Acuérdate del día de reposo para santificarlo” ( Éxodo 20:8 ). Si deseas una explicación de este mandamiento, fíjate en “Día de reposo”, páginas 56–57. “Honra a tu padre y a tu madre” ( Éxodo 20:12 ). Este mandamiento sigue en vigor aún cuando seamos adultos. Siempre debemos buscar maneras de honrar a nuestros padres. “No matarás” ( Éxodo 20:13 ). Si deseas una explicación sobre la forma en que se aplica este mandamiento a las personas que deben ir a la guerra, fíjate en “Guerra”, páginas 98–99. “No cometerás adulterio” ( Éxodo 20:14 ). En una revelación de los últimos días, el Señor no sólo condenó el adulterio, sino toda “cosa semejante” ( D. y C.59:6 ). La fornicación, la homosexualidad y otros pecados sexuales son violaciones del séptimo mandamiento. Si deseas una explicación adicional, fíjate en “Castidad”, páginas 41–46. “No hurtarás” ( Éxodo 20:15 ). El hurto o robo es una forma de falta de honradez. Si deseas una explicación de la honradez, fíjate en las páginas 102–103, “No hablarás contra tu prójimo falso testimonio” ( Éxodo 20:16 ). El dar falso testimonio es otra forma de la falta de honradez. Si deseas una explicación sobre la honradez, fíjate en las páginas 102–103, “No codiciarás” ( Éxodo 20:17 ). El codiciar, o sea, envidiar algo que pertenece a otra persona daña el alma. Puede consumir nuestros pensamientos y asediarnos con constante infelicidad e insatisfacción. A menudo lleva a otros pecados y a las deudas.
Aunque la mayoría de los Diez Mandamientos indican lo que no debemos hacer, también representan lo que debemos hacer. El Salvador resumió los Diez Mandamientos en dos principios: el amor por el Señor y el amor por nuestros semejantes: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
¿Cuál es el mandamiento más importante?
Octubre 25:¿Cuál es el mandamiento más importante? En aquel tiempo los fariseos se reunieron al saber que Jesús había hecho callar a los saduceos, y uno que era maestro de la ley, para tenderle una trampa, le preguntó: “Maestro, ¿cuál es el mandamiento más importante de la Ley?”.
- Jesús le dijo: “Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, toda tu alma y toda tu mente‟.
- Este es el más importante y el primero de los mandamientos.
- Pero hay un segundo, parecido a este; dice: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”.
- En estos dos mandamientos se basan toda la ley y los profetas,1.
- ¿Cuál es el mandamiento principal? La promulgación del Decálogo –los Diez Mandamientos de la Ley de Dios– (Ex 20, 1-21), que en la Biblia corresponde a lo acontecido en el siglo XII a.C.
en el marco de una alianza celebrada entre Él y su pueblo en tiempos de Moisés, comienza en el libro del Éxodo dos capítulos antes del texto de la primera lectura de este domingo (Éxodo 22, 20-26), con una introducción en la que Dios le recuerda a su pueblo lo que ha hecho por él: “Yo soy el Señor tu Dios, que te sacó de Egipto, donde eras esclavo” (Ex 20, 2).
- Y la puesta en práctica de esos 10 mandamientos –los 3 primeros referidos directamente a Dios y los otros 7 al prójimo– era por lo mismo para los israelitas la forma de corresponder al amor de Dios.
- Pero en general los doctores de la Ley en tiempos de Jesús solían entender los mandamientos como obligaciones impuestas por un Dios castigador, mientras que para nuestro Señor, en cambio, su significado es la invitación de Dios a corresponder a su amor rechazando la idolatría –es decir, no endiosando las cosas ni los poderes terrenales– y tratándonos todos los unos a los otros como hijos de un mismo Creador.2.
Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, toda tu alma y toda tu mente La respuesta de Jesús a los fariseos comienza con una cita del Deuteronomio, libro cuyo nombre significa Segunda promulgación de la Ley que fue encontrado bajo el Templo de Jerusalén 7 siglos a.C.
- Y en el cual se evoca el testamento de Moisés antes de morir.
- En él aparecen de nuevo los 10 mandamientos con la misma introducción: “Yo soy el Señor tu Dios, que te sacó de Egipto, donde eras esclavo” (Dt 5, 6-21), y el texto con el que Jesús inicia su respuesta se conoce como Shemá Israel, las dos primeras palabras en hebreo de dos versículos que los judíos memorizaban desde niños: “Escucha Israel: El Señor nuestro Dios es el único Señor.
Ama al Señor con todo tu corazón, toda tu alma y toda tu mente” (Dt 6, 4-5). Los versículos siguientes dicen: “Grábate en la mente todas las cosas que hoy te he dicho y enséñalas continuamente a tus hijos; háblales de ellas, tanto en tu casa como en el camino, y cuando te acuestes y cuando te levantes.
- Lleva estos mandamientos atados en tu mano y en tu frente como señales y escríbelos también en los postes y en las puertas de tu casa” (Dt 6, 6-7).
- En tiempos de Jesús los fariseos que se le oponían cumplían al pie de la letra la última frase de este texto, llevando materialmente atadas en sus manos y en su frente las “filacterias”, unos pequeñísimos rollos de papiro que simbolizaban la Ley de Dios –en hebreo la Torá –, pero no realizaban el espíritu de lo mandado por Dios, que consiste en que el amor a Él se muestre en el respeto y la compasión para con los prójimos.3.
Amarás a tu prójimo como a ti mismo Pablo recuerda en la segunda lectura (1ª Tesalonicenses 1, 5c-10) cómo los primeros cristianos de la ciudad griega llamada Tesalónica habían abandonado los ídolos y se habían convertido a Dios. Precisamente el primer mandamiento, amar a Dios sobre todas las cosas, significa rechazar toda forma de idolatría.
Y nosotros podemos aplicar esto a nuestra situación actual entendiendo que amar a Dios “sobre todas las cosas” implica no dejarse arrastrar por el culto a los falsos dioses del dinero, el prestigio o el poder, que son ídolos por los cuales se suele remplazar al verdadero Dios. Ahora bien, el amor a Dios sólo puede verificarse en el amor al prójimo,
Por eso Jesús no reduce su respuesta a los versículos del Shemá Israel del Deuteronomio, sino que cita además otro texto, el del libro llamado Levítico –escrito hacia el siglo V a.C. por levitas o descendientes de Leví, uno de los doce hijos del patriarca Jacob, que colaboraban en el culto del Templo de Jerusalén–.
En este otro texto dice Dios: “Ama a tu prójimo como a ti mismo” (Lv 19, 18). Y luego concluye Jesús su respuesta con una frase que indica la unión inseparable entre el amor a Dios y el amor al prójimo: “En estos dos mandamientos se basan toda la Ley y los Profetas”. A primera vista, no está diciendo nada nuevo.
Pero si consideramos el contexto de los Evangelios, encontramos tres detalles muy significativos ampliamente desarrollados, entre otros, por el papa Benedicto XVI en la primera de sus encíclicas, publicada a fines del año 2005 con el título en latín Deus caritas est ( Dios es amor ):
El prójimo (próximo) no es sólo el de la misma raza, nación o cultura, o el que piensa igual, sino todo ser humano de cualquier condición, en especial el más necesitado, el excluido, el marginado, el oprimido. Amar al prójimo como a sí mismo (que corresponde a la llamada Regla de Oro: Traten a los demás como quieren que los demás los traten a ustedes –Mt 7,12–), implica que sólo quien se acepta y se reconoce como hijo o hija de Dios, podrá aceptar y reconocer como tales a las demás personas. Reconocer que Dios nos ama implica disponernos amar a nuestros prójimos del mismo modo en que Dios nos ha mostrado su amor a nosotros en la persona de Jesús, quien al encarnarse se hizo nuestro prójimo ( Dios-con-nosotros ) y entregó su vida en la cruz por todos.
Al celebrar pues la Eucaristía, que es el memorial del Amor de Dios manifestado en el sacrificio redentor de Cristo, dispongámonos a realizar en nuestra vida el mandamiento nuevo del amor que el propio Jesús nos dejó como testamento, en el sentido nuevo y pleno que Él quiso darle a la Regla de Oro: Ámense los unos a los otros como yo los he amado (Evangelio según san Juan 13, 34).
¿Cuántas tablas le dio Dios a Moisés?
De Wikipedia, la enciclopedia libre «Decálogo» redirige aquí. Para las máximas atribuidas a Solón, véase Decálogo de Solón, «El decálogo» redirige aquí. Para la miniserie polaca, véase Dekalog, «Tablas de la ley» redirige aquí. Para las normas de la Antigua Roma, véase Ley de las XII Tablas, Decálogo. Las Tablas de la Ley Mosaica y el comienzo de cada uno de los Diez Mandamientos en hebreo. Vitral decimonónico de la Sinagoga y Museo Alsaciano de Estrasburgo, Francia, Arte sefardí, Decálogo de Jekuthiel Sofer, 1768, que imita la distribución en dos tablas. Bibliotheca Rosenthaliana, Ámsterdam, Rembrandt, Moisés con las Tablas de la Ley, 1659. Tissot, Moisés con los Diez Mandamientos, gouache, c.1896-1902. Jewish Museum, Nueva York. Los Diez Mandamientos, también conocidos como el Decálogo, de las palabras griegas δέκα (diez) y λόγος (palabras), son un conjunto de principios éticos y de adoración, que juegan un papel importante en el judaísmo y el cristianismo,
- Incluyen instrucciones de como adorar solo a un Dios y guardar el día de reposo, así como también prohibiciones en contra de la idolatría, asesinato, robo, deshonestidad y adulterio.
- Diferentes grupos religiosos siguen distintas tradiciones en cuanto a la manera de interpretarlos y enumerarlos.
- Los Diez Mandamientos aparecen dos veces en la Biblia hebrea : en los libros de Éxodo y Deuteronomio,
De acuerdo a la historia narrada en el libro de Éxodo, Dios escribió estos mandatos en dos tablas de piedra, las que dio a Moisés en el Monte Sinaí ; según el relato, cuando bajaba del monte, vio al pueblo que estaba adorando un becerro de oro y enfurecido las rompió.
¿Qué significa la palabra no cometerás actos impuros?
La virtud de la castidad – El Cuerpo de un cristiano, desde que recibió el Bautismo, es Templo de Dios, y se debe profanar cometiendo pecados de impureza. La sexualidad es un regalo que Dios ha dado, por eso, se tiene que vivir la santa pureza, es decir, la virtud de la castidad.
A través de su mandamiento, pide no cometer actos impuros y vivir la sexualidad con dignidad. El sexto mandamiento de la Ley de Dios prohíbe todos los pecados contrarios a la castidad. También toda acción, mirada o conversación contrarias a la castidad. Los pecados contra la pureza, cometidos con pleno conocimiento y consentimiento pleno, son siempre graves.
Los principales medios para guardar la santa pureza son: la oración, la confesión y la comunión frecuentes, la devoción a la Santísima Virgen, la modestia y la guarda de los sentidos y la huida de las ocasiones de pecar, como conversaciones, miradas, lecturas, amistades y espectáculos deshonestos.
¿Cuántas veces golpeó la roca Moisés?
1 Moisés golpea la roca El primer mes del año, toda la comunidad de Israel llegó al desierto de Zin y acampó en Cades. Mientras estaban allí, Miriam murió y la enterraron.2 Ya que en ese lugar no había agua para que el pueblo bebiera, la gente se rebeló contra Moisés y Aarón.3 El pueblo culpó a Moisés y dijo: «¡Si tan solo hubiéramos muerto con nuestros hermanos delante del Señor ! 4 ¿Por qué trajiste a la congregación del pueblo del Señor a este desierto para morir, junto con todos nuestros animales? 5 ¿Por qué nos obligaste a salir de Egipto y nos trajiste a este terrible lugar? ¡Esta tierra no tiene grano ni higos ni uvas ni granadas ni agua para beber!».6 Entonces Moisés y Aarón se apartaron del pueblo y fueron a la entrada del tabernáculo, donde cayeron rostro en tierra.
- Allí la presencia gloriosa del Señor se les apareció, 7 y el Señor le dijo a Moisés: 8 «Tú y Aarón tomen la vara y reúnan a toda la comunidad.
- En presencia de todo el pueblo, háblale a la roca y de ella brotará agua.
- De la roca proveerás suficiente agua para satisfacer a toda la comunidad y a sus animales».9 Así que Moisés hizo lo que se le dijo.
Tomó la vara del lugar donde se guardaba en la presencia del Señor,10 Luego él y Aarón mandaron a llamar al pueblo a reunirse frente a la roca. «¡Escuchen, ustedes rebeldes! —gritó—. ¿Acaso debemos sacarles agua de esta roca?».11 Enseguida Moisés levantó su mano y golpeó la roca dos veces con la vara y el agua brotó a chorros.
Así que toda la comunidad y sus animales bebieron hasta saciarse.12 Sin embargo, el Señor les dijo a Moisés y a Aarón: «¡Puesto que no confiaron lo suficiente en mí para demostrar mi santidad a los israelitas, ustedes no los llevarán a la tierra que les doy!».13 Por eso este lugar se conoce como las aguas de Meriba (que significa «discusión») porque allí el pueblo de Israel discutió con el Señor y él demostró su santidad entre ellos.1 Moisés golpea la roca El primer mes del año, toda la comunidad de Israel llegó al desierto de Zin y acampó en Cades.
Mientras estaban allí, Miriam murió y la enterraron.2 Ya que en ese lugar no había agua para que el pueblo bebiera, la gente se rebeló contra Moisés y Aarón.3 El pueblo culpó a Moisés y dijo: «¡Si tan solo hubiéramos muerto con nuestros hermanos delante del Señor ! 4 ¿Por qué trajiste a la congregación del pueblo del Señor a este desierto para morir, junto con todos nuestros animales? 5 ¿Por qué nos obligaste a salir de Egipto y nos trajiste a este terrible lugar? ¡Esta tierra no tiene grano ni higos ni uvas ni granadas ni agua para beber!».6 Entonces Moisés y Aarón se apartaron del pueblo y fueron a la entrada del tabernáculo, donde cayeron rostro en tierra.
- Allí la presencia gloriosa del Señor se les apareció, 7 y el Señor le dijo a Moisés: 8 «Tú y Aarón tomen la vara y reúnan a toda la comunidad.
- En presencia de todo el pueblo, háblale a la roca y de ella brotará agua.
- De la roca proveerás suficiente agua para satisfacer a toda la comunidad y a sus animales».9 Así que Moisés hizo lo que se le dijo.
Tomó la vara del lugar donde se guardaba en la presencia del Señor,10 Luego él y Aarón mandaron a llamar al pueblo a reunirse frente a la roca. «¡Escuchen, ustedes rebeldes! —gritó—. ¿Acaso debemos sacarles agua de esta roca?».11 Enseguida Moisés levantó su mano y golpeó la roca dos veces con la vara y el agua brotó a chorros.
Así que toda la comunidad y sus animales bebieron hasta saciarse.12 Sin embargo, el Señor les dijo a Moisés y a Aarón: «¡Puesto que no confiaron lo suficiente en mí para demostrar mi santidad a los israelitas, ustedes no los llevarán a la tierra que les doy!».13 Por eso este lugar se conoce como las aguas de Meriba (que significa «discusión») porque allí el pueblo de Israel discutió con el Señor y él demostró su santidad entre ellos.14 Edom le niega el paso a Israel Mientras Moisés estaba en Cades, envió embajadores al rey de Edom con el siguiente mensaje: «Esto es lo que dicen tus parientes, los israelitas: tú sabes todas las dificultades por las que hemos pasado.15 Nuestros antepasados bajaron a Egipto y allí vivimos un largo tiempo.
Los egipcios nos maltrataron brutalmente, tanto a nosotros como a nuestros antepasados; 16 pero cuando clamamos al Señor, él nos oyó y envió a un ángel que nos sacó de Egipto. Ahora estamos acampando en Cades, la ciudad en la frontera de tu territorio.17 Por favor, permítenos atravesar tu territorio.
¿Por qué Dios escoge a Moisés para liberar a Israel?
Moisés era manso y daba lugar a ser guiado por la mano de Dios. Consecuentemente, por su medio se realizaron grandes y poderosos milagros para libertar al pueblo escogido de Dios, Israel, de su cautiverio en Egipto.
¿Qué pasó con las tablas de los diez mandamientos?
En el Monte Sinaí, Moisés recibió leyes, mandamientos, ordenanzas y convenios (pactos) del Señor que se escribieron en tablas de piedra. Cuando Moisés descendió de Sinaí y vio a los hijos de Israel adorar al becerro de oro, arrojó las tablas al suelo y las quebró (véase Éxodo 32:15–19), ya que los israelitas no habían demostrado ser dignos de recibir todo lo que había escrito en ellas.Nosotros también podemos perder grandes bendiciones si somos desobedientes.
- No obstante, el Señor fue muy paciente con los hijos de Israel y les dio la oportunidad de arrepentirse y de regresar a Él.
- En virtud de que el Señor desea ayudarnos, nos da con frecuencia mandamientos adicionales o nuevos y más estrictos, los cuales nos brindan la oportunidad de arrepentirnos y recibir finalmente la plenitud de bendiciones que Él desea darnos.
En Éxodo 34 se registran mandamientos adicionales que el Señor dio a los desobedientes hijos de Israel.
¿Por qué se crearon los mandamientos?
En uno de los tres viajes que Moisés hizo al Monte Sinaí (véase Éxodo 19), Dios le enseñó los mandamientos de los que leemos en Éxodo 20. A esas enseñanzas comúnmente se les conoce como los Diez Mandamientos. Tiempo después, el Señor dijo que los Diez Mandamientos eran “las palabras del pacto”, o sea, los requisitos para recibir el convenio (véase Éxodo 34:28).
- Por consiguiente, los Diez Mandamientos se dieron a los israelitas para que los guardaran antes de obtener el permiso de subir al Monte Sinaí.
- Los Diez Mandamientos eran en esa época algo parecido a lo que son en la actualidad es decir, las normas que debemos guardar para obtener la recomendación para el templo.Tiempo después, los Diez Mandamientos se escribieron en tablas de piedra y se colocaron en el arca del pacto (de la cual leerás más adelante) y se les llamó “el testimonio”.
El tener un testimonio de los principios de los Diez Mandamientos es fundamental para comprender los principios del Evangelio que el Salvador y el profeta José Smith enseñaron más adelante (véase Deuteronomio 10:1–5).El élder Bernard P. Brockbank, Asistente del Quórum de los Doce Apóstoles, dijo: “Los Diez Mandamientos dados por Dios son todavía una parte básica del plan de vida de Dios y una parte fundamental del Evangelio del reino.
¿Qué pasó con el Arca de la Alianza?
Investigaciones israelíes y una subasta de cine ponen de actualidad el Arca de la Alianza, el rico cofre donde se custodiaron los Diez Mandamientos, un tesoro que se detalla en la Biblia y que persiguen Hollywood y estudiosos de medio mundo. Por Fátima Uribarri / Foto: Cordon Press – Se van a subastar en Los Ángeles objetos utilizados en el rodaje de películas de enorme tirón como Alien, Rocky, la saga de La guerra de las galaxias o En busca del Arca perdida,
- De esta última se pujará por el medallón que ayudó a Indiana Jones a ubicar el paradero del Arca de la Alianza.
- Aquella búsqueda peliculera prosigue en la vida real.
- Eminentes arqueólogos, periodistas, novelistas, historiadores, aventureros o investigadores de casi todas las nacionalidades se han zambullido en la misión de dar con el arca tan detalladamente descrita en la Biblia, en el libro del Éxodo (capítulo 25): «Harás un arca de acacia de dos codos y medio de largo, codo y medio de ancho y codo y medio de alto.
La revestirás de oro puro; por dentro y por fuera las revestirás; y, además pondrás en su derredor una moldura de oro». En su interior, este rico cofre guardaba las Tablas de la Ley, los Diez Mandamientos dictados por Dios a Moisés en el Monte Sinaí. La Biblia cuenta que el arca y el tabernáculo (un templo portátil donde se colocó) atravesaron con Josué el río Jordán camino de Jericó.
- El arca estuvo en Gilgal –junto al mar Muerto– Betel y Siló.
- Pasó durante un tiempo a manos de los filisteos; la recuperaron los judíos y el rey David ordenó su traslado a Jerusalén.
- Se depositó en el sanctasanctorum del templo del rey Salomón, la primera ubicación con ambición perenne para el arca.
- Pero en el año 587 a.C.
los babilonios comandados por Nabucodonosor destruyeron y saquearon el templo. Escena de Indiana Jones en ‘En busca del Arca perdida’ ¿Qué paso con el arca? Brotan las hipótesis más variadas. El arqueólogo Eric H. Cline sostiene que se fundió para aprovechar su oro. Pero el arca no aparece en las minuciosas listas de confiscaciones de los babilonios.
Es raro. Hay diversas teorías respecto a su paradero, Unos la ubican en Jordania. Otros aseguran que Melenik –el hijo que tuvo el rey Salomón con la reina de Saba– se la llevó a Etiopía y en este país hay varias ubicaciones posibles. Hay quienes sostienen que está en un túnel secreto excavado bajo la Explanada de las Mezquitas en Jerusalén.
Incluso hay quien cree que el arca ha regresado a su lugar de origen y que se encuentra en el Monte Sinaí. También hay evidencias de que –como se cuenta en la película de Indiana Jones– los nazis se interesaron por ella. El arca de la alianza (un objeto sagrado al que incluso se le atribuyen poderes sobrenaturales) genera una constante curiosidad universal.
Uno de los últimos hallazgos –habrá más porque la búsqueda no cesa– lo ha realizado la Universidad de Tel Aviv al excavar donde estuvo la antigua ciudad de Quiriat-Jearim, emplazamiento del arca anterior a su traslado a Jerusalén. Los investigadores han encontrado allí restos de un sitio bíblico del siglo VIII a.C.
que podría haber servido como santuario para el Arca de la Alianza. La búsqueda continúa.
¿Qué pasó en el monte Sinaí?
Joan Soldevila Adán Barcelona 02/12/2020 19:00 Actualizado a 02/12/2020 19:27 La supuesta zarza de Moisés, citada en la Biblia, se conserva en el Monasterio de Santa Catalina, en el desierto del Sinaí. — “Y apacentando Moisés las ovejas de su suegro Jetro, sacerdote de Madián, llevó las ovejas más allá del desierto y llegó a Horeb, monte de Dios.
Y viendo Jehová que él iba a mirar, lo llamó Dios de en medio de la zarza y dijo: ¡Moisés, Moisés! Y él respondió: Heme aquí. ” El monte Sinaí, también llamado monte Horeb, es una montaña situada al sur de la península del Sinaí, al nordeste de Egipto, entre África y Asia. Se trata del lugar donde, según el Antiguo Testamento, Dios entregó a Moisés los Diez Mandamientos.
Estas fotografías, compartidas en Las Fotos de los Lectores de La Vanguardia y que se reproducen a continuación, fueron tomadas en los mismos lugares de los supuestos hechos, en el bellísimo y disputado desierto del Sinaí. Vista del desierto del Sinaí. Joan Soldevila Adán / JSA En ruta por el desierto del Sinaí. Joan Soldevila Adán / JSA Guiados por el Sinaí. Joan Soldevila Adán / JSA El desierto del Sinaí nos transporta a los lugares descritos por la Biblia. Joan Soldevila Adán / JSA Letrero del Monasterio de Santa Catalina. Joan Soldevila Adán / JSA Zarzas del Sinaí. Joan Soldevila Adán / JSA El Monasterio de Santa Catalina, en el desierto del Sinaí. Joan Soldevila Adán / JSA Si te han gustado las fotos, te invitamos a participar en nuestra encuesta:
¿Que recibió Moisés en el monte de Sinaí?
En la Biblia – Capilla de la Santísima Trinidad en lo alto del monte Sinaí El monte Sinaí es célebre por su gran importancia en el libro bíblico del Éxodo, Si el actual Gebel Musa es el bíblico monte Sinaí sigue siendo causa de gran controversia religiosa y entre los estudiosos.
En la Torá, el monte Sinaí es también llamado monte Horeb: con este nombre es citado en libro de Reyes como destino de Elías en su huida (Reyes I 11:19:1 – 11:19:18). También es conocido como el monte de Yahveh, Los eruditos hebreos han asegurado largamente que la localización exacta del monte Sinaí era desconocida, dando la razón de que su localización era situada en tierra incógnita,
Es uno de los lugares más sagrados de la Biblia, especialmente famoso por haber sido el lugar donde Moisés recibió los Diez Mandamientos de Yahveh. En tiempos bíblicos, el lugar de la montaña era aparentemente bien conocido, como se aprecia en la descripción de José: Acampó en la montaña llamada Sinaí, dirigiendo a las multitudes para alimentarlas allá.
Está en la más alta de las montañas del lugar, y la de mejor pasto, pues la hierba es buena; y no había sido comida antes, a causa de la opinión que tenían los hombres de que Dios moraba allí, y los pastores no osaban subir hasta el lugar. Flavio Josefo, Antigüedades Judías, Libro II, Capítulo 12. Y era conocido en los días de Acab, rey de Israel, como se narra en la historia del viaje de Elías: Y él se levantó, y comió y bebió, y caminó con la fuerza de esa comida cuarenta días y cuarenta noches hasta Horeb, el monte de Dios.
Reyes:19,8 La última mención bíblica del lugar es en el Nuevo Testamento: Porque el monte Sinaí está en Arabia, y corresponde a la Jerusalén actual, ya que ella (Agar) con sus hijos viven en la esclavitud. Gálatas 4-25 La posición de la montaña fue evidentemente olvidada posteriormente. El posicionarlo en Jebel Musa lo hicieron dos monjes que anunciaron haber encontrado la “zarza ardiente” de Moisés, cerca de 300 d C. Esta zarza está situada, según la tradición, en el monasterio de Santa Catalina, Egipto,
La creencia del lugar del monte Sinaí ha perdurado 1700 años y se ha convertido en parte de la tradición. El lugar bíblico real, sin embargo, es todavía incierto. El nombre Sinaí proviene de ” dios Luna Sin “, probablemente, al igual que el desierto de Sin, El judaísmo enseña que tan pronto como los judíos recibieron los diez mandamientos en el monte Sinaí, fueron odiados por el resto del mundo por haber sido los que recibieron la palabra divina (una situación presentada como un juego de palabras: Sinai como Seen-ah, que significa odio).
La zona fue alcanzada por los hebreos el tercer mes del Éxodo, Allí quedaron acampados aproximadamente un año. Los últimos veintidós capítulos del Éxodo, junto con todo el Levítico y el Libro de los Números cap.1-1, contienen un registro de lo que ocurrió mientras permanecieron en el monte Sinaí.
¿Por que fueron dados los mandamientos?
En uno de los tres viajes que Moisés hizo al Monte Sinaí (véase Éxodo 19), Dios le enseñó los mandamientos de los que leemos en Éxodo 20. A esas enseñanzas comúnmente se les conoce como los Diez Mandamientos. Tiempo después, el Señor dijo que los Diez Mandamientos eran “las palabras del pacto”, o sea, los requisitos para recibir el convenio (véase Éxodo 34:28).
- Por consiguiente, los Diez Mandamientos se dieron a los israelitas para que los guardaran antes de obtener el permiso de subir al Monte Sinaí.
- Los Diez Mandamientos eran en esa época algo parecido a lo que son en la actualidad es decir, las normas que debemos guardar para obtener la recomendación para el templo.Tiempo después, los Diez Mandamientos se escribieron en tablas de piedra y se colocaron en el arca del pacto (de la cual leerás más adelante) y se les llamó “el testimonio”.
El tener un testimonio de los principios de los Diez Mandamientos es fundamental para comprender los principios del Evangelio que el Salvador y el profeta José Smith enseñaron más adelante (véase Deuteronomio 10:1–5).El élder Bernard P. Brockbank, Asistente del Quórum de los Doce Apóstoles, dijo: “Los Diez Mandamientos dados por Dios son todavía una parte básica del plan de vida de Dios y una parte fundamental del Evangelio del reino.
¿Quién esclaviza al pueblo de Israel?
Análisis de las Escrituras y conceptos para poner en práctica – Al enseñar los siguientes pasajes de las Escrituras, analice la forma en que se podrían poner en práctica en el diario vivir. Aliente a los miembros de la clase a relatar experiencias que se relacionen con los principios de las Escrituras.